Render del Regiotram de Occidente. Foto: Gobernación de Cundinamarca. | Foto: Gobernación de Cundinamarca

TRANSPORTE

Experto señala que con recursos del regiotram se podría hacer un tren de alta velocidad para la región

De acuerdo con Laurentino Quiroga, cada kilómetro de los trenes de alta velocidad de España cuesta entre US$ 20 millones y US$ 25 millones, el mismo costo que tiene el regiotram.

22 de junio de 2021

Aunque el regiotram de Occidente es un proyecto que ya viene avanzando, que conectará a varios municipios de Cundinamarca con el centro de Bogotá a través de trenes eléctricos y que se proyecta que esté listo para 2024, algunos expertos han criticado la iniciativa, argumentando que se pierde la posibilidad de aprovechar más la red férrea, entre otras cosas.

El experto en ingeniería y trenes del King’s College de Londres Laurentino Quiroga presentó una denuncia ante la Procuraduría General de la Nación de Colombia en la que argumentó que los costos del regiotram están muy por encima del estándar internacional.

Según Quiroga, el costo del proyecto que ha sido publicado en el Secop es de $ 3,6 billones, es decir, aproximadamente US$ 1.000 millones. “La longitud de la línea férrea Bogotá–Facatativá es de 40 kilómetros, entonces el kilómetro de tranvía sería de US$ 25 millones. En el mundo, el precio estándar de construcción de línea férrea de alta velocidad es de US$ 20 millones”, indica el experto.

Según comentó el ingeniero, el regiotram “no es un tren de cercanías, en realidad es un tranvía”, por lo que considera que se está cometiendo un detrimento patrimonial al pagar por un “bus eléctrico lo que se podría pagar por un tren, que tiene mayor capacidad”.

“Los tranvías se utilizan para prestar un servicio urbano en ciudades pequeñas o medianas, pero nunca para prestar servicios intermunicipales. El servicio de cercanías en una ciudad tan grande como Bogotá se debe prestar con trenes, que son veloces y transportan grandes cantidades de pasajeros y de carga”, afirmó Quiroga.

De igual forma, pone el ejemplo de España, que asegura es el país que más sistemas ferroviarios ha construido en los últimos años y ha logrado poner a andar trenes a un costo de menos de US$ 20 millones por kilómetro.

En este sentido, considera que la opción a seguir debería ser proyectar sistemas férreos de carácter nacional que puedan conectar diferentes regiones del país, para el transporte de pasajeros y de carga, lo cual disminuiría los costos para los productores y consumidores.

“Un sistema ferroviario de orden nacional cambiaría para bien la realidad económica del país, tan necesaria en estos momentos que estamos atravesando por la peor crisis económica de la historia reciente”, explicó.

El proyecto no ha dejado de tener polémica desde que el exgobernador de Cundinamarca decidiera ponerlo sobre la mesa. En un principio, fue el exalcalde Enrique Peñalosa el que lo mencionó, diciendo que era una obra costosa y tenía mucha menos capacidad que el TransMilenio por la calle 13. “Regiotram viene cargado de municipios y tiene capacidad de apenas 8.400 Pasajeros/Hora/Sentido (PHS), mientras que TransMilenio 13 puede mover más de 40.000 PHS”, indicó en su momento.

Sin embargo, y a pesar de la oposición del exmandatario, el exgobernador consiguió los recursos y logró que el regiotram quedara financiado, un proyecto que su sucesor, Nicolás García, ha celebrado, debido al progreso y al ahorro de tiempo que traerá este sistema para los habitantes de los municipios beneficiados.

Cabe mencionar que el proyecto cuenta con una inversión de $ 3,7 billones. El 70 % lo aporta el Gobierno nacional, el porcentaje restante lo asume la Gobernación de Cundinamarca. Esta megaobra impulsará la competitividad, el turismo y el empleo en la región. “La fase de preconstrucción generará alrededor de 300 empleos y la etapa de construcción creará cerca de 9.000 opciones laborales directas e indirectas”, afirmó en agosto del año pasado el gobernador García.

Regiotram contará con 17 estaciones, ocho localizadas en los municipios de la Sabana y nueve en el Distrito. En su extremo oriental se conectará con el metro de Bogotá, cuya primera línea debería estar en funcionamiento en 2028.

La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, también ha apoyado la construcción de estos sistemas e incluso está trabajando de la mano para impulsar el regiotram del Norte, que conectaría a Bogotá con municipios como Chía, Cajicá o Zipaquirá. Incluso, García propuso extenderlo hasta Gachancipá, en donde no solo se encuentra una población en constante crecimiento, sino un conjunto importante de fábricas y bodegas de firmas locales e internacionales.