EE. UU.
Inflación en EE. UU. se aceleró en julio y prende alertas en los mercados
La situación del costo de vida en Europa tampoco es la mejor.
La inflación se aceleró de nuevo en julio en Estados Unidos, a 3,3 % interanual contra 3,0 % en junio, según el índice PCE, la medida usada por el banco central estadounidense (Fed), que quiere llevarla a 2,0 %.
“Los precios de los bienes cayeron 0,3 % y los precios de los servicios subieron 0,4 %”, detalló el Departamento de Comercio, que publicó los datos el jueves.
El índice PCE sigue la misma tendencia que el IPC, publicado previamente y que situó la inflación en 3,2 % interanual en julio, contra 3,0 % en junio. En un mes, la inflación PCE se mantuvo estable en 0,2 %, en línea con las expectativas de los analistas.
Excluyendo los precios de la energía y los alimentos, la llamada inflación subyacente también se aceleró, a 4,2 % interanual, frente a 4,1 % en junio, y también se mantuvo estable en un mes, en 0,2 %.
Tendencias
Por otra parte, el gasto de los hogares se aceleró (+0,8 % frente a +0,6 % en junio), mientras que sus ingresos aumentaron menos (+0,2 % frente a +0,3%). La Fed, responsable de reducir la inflación, ha elevado sus tasas clave 11 veces desde marzo de 2022. Actualmente, en su nivel más alto en 22 años, se sitúan en el rango de 5,25 a 5,50 %.
Cabe recordar que esta semana se supo también que la confianza de los consumidores estadounidenses se degradó en agosto, luego de alcanzar en julio un máximo en dos años, debido a nuevas inquietudes por alzas de precios, en particular de la gasolina y productos de consumo diario.
El índice de confianza cayó a 106,1 puntos, según el instituto Conference Board. El dato de julio fue revisado ligeramente a la baja, a 114 puntos frente a 117 anunciados inicialmente. Para julio, los analistas esperaban 116 puntos según el consenso reunido por Market Watch.
Los consumidores están “nuevamente preocupados por el alza de precios en general, pero en particular de los alimentos y la gasolina”, explicó Dana Peterson, economista jefe del Conference Board.
El panorama no mejora en Europa
La inflación de la eurozona se mantuvo estable en agosto en 5,3% interanual, según los datos oficiales publicados este jueves, que plantean un dilema al Banco Central Europeo sobre si continuar el alza de los tipos de interés o cambiar su política ante el riesgo de una recesión.
El Banco Central Europeo (BCE) ha subido las tasas de referencia a un máximo desde mayo de 2001 para frenar el brote inflacionario, pero la presidenta del emisor europeo, Christine Lagarde, insinuó que la entidad podría hacer una pausa. No hay un consenso entre los analistas sobre qué postura adoptará el BCE en la próxima cita del 14 de septiembre.
El índice de los precios al consumidor alcanzó un 5,3 % en agosto, pese a una caída de los precios de la energía y a una leve desaceleración del incremento del costo de los alimentos, informó la oficina europea de estadística.
Los datos de inflación publicados por Eurostat están por encima de las expectativas de los analistas de Factset y de Bloomberg, que proyectaron un alza de los precios de 5,1 %. El indicador de inflación de los 20 países que utilizan el euro tocó un máximo de 10,6 % en octubre de 2022 por el incremento de los precios del gas y del petróleo a raíz del impacto de la guerra en Ucrania.
Pero este indicador sigue por encima del objetivo del BCE de una inflación de un 2 %. En su reunión, los gobernadores del emisor del euro deberán sopesar el riesgo de la inflación frente a los temores sobre el estado de la economía después de que en agosto algunos indicadores de la actividad señalaran problemas en el horizonte.
El indicador sobre los gestores de compras de agosto mostró que la economía de la zona euro se está contrayendo al ritmo más rápido registrado en tres años, debido a que la caída de la actividad manufacturera se está contagiando al sector de los servicios.
Presión al precio de los alimentos
La inflación en la zona euro está en desaceleración desde mayo, tras haber registrado un rebrote en abril. Los precios alimentarios subieron un 9,8 % en agosto, frente a un alza del 10,8 % de julio, según los datos de Eurostat.
La inflación subyacente, que excluye precios más volátiles como los de la energía y los de los alimentos, fue de 5,3 % en agosto, frente a un 5,5 % registrado en julio. Este indicador es una de las claves que considera el BCE en sus decisiones de política monetaria.
Por su parte, la tasa de desempleo de la eurozona se mantuvo estable en julio, en 6,4 % de la población activa, en comparación con los datos de junio, y sigue en un mínimo histórico, según Eurostat. Este indicador se sitúa en un mínimo desde que la oficina europea de estadística comenzó a recopilar sus datos en abril de 1998 para los países que decidieron adoptar la moneda única.
*Con información de AFP.