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Al estilo Trump, Javier Milei también quiere levantar su propio muro para evitar que migrantes lleguen a Argentina
El gobierno de Milei planea levantar una cerca en su frontera con Bolivia, con el fin de frenar el narcotráfico.

El presidente de Argentina, Javier Milei, anunció el lunes la construcción de una cerca de alambre de 200 metros en la localidad de Aguas Blancas, en la provincia norteña de Salta, que dividirá la frontera con Bolivia, algo parecido al muro kilométrico que planea construir Donald Trump en la frontera de Estados Unidos con México. Esta cerca tiene como objetivo frenar el paso ilegal de personas y del narcotráfico, según lo informó la administración argentina.
La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, dijo que la región “se encontraba completamente descontrolada”, por lo que el cerco se encargará de delimitar la distancia entre la estación de autobuses de la zona y la oficina de migraciones del Puerto de Chalanas, por donde hay constante circulación de personas que cruzan sin pasar por los controles, según las autoridades del país.

“El cruce fronterizo era tierra de nadie: narcotráfico, muertes y descontrol”, aseguró la ministra Bullrich en un comunicado. El pasado diciembre, el gobierno de Argentina ya había enviado al rededor de 300 agentes de las fuerzas federales a Aguas Blancas para fortalecer los controles migratorios y aduaneros. Aun así, con el muro alambrado se buscará “reforzar la pared existente, vulnerada repetidamente por el narcotráfico para ingresar cocaína”, según la cartera de Bullrich.
Por su parte, el interventor de Aguas Blancas, Adrián Zigarán, explicó a la prensa local que esta zona es “un punto al que la gente llegaba ya sea por taxi, colectivo, por lo que sea, y de ahí, saltaban un muro, que es de protección por las inundaciones que genera el [río] Bermejo, y la gente salía caminando, e iba para las chalanas. O sea, del puesto de migraciones, 200 metros antes, la gente saltaba hacia el río”.
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A la medida, el gobierno de Bolivia dijo que “los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales”. El Ministerio de Relaciones Exteriores expresó en un comunicado “su preocupación ante el anuncio del Gobierno de Argentina de instalar una cerca de 200 metros en la frontera entre ambos países” y pidió el diálogo bilateral “para encontrar soluciones coordinadas a temas en común. Cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos”.

El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció que pedirá, a través de los canales diplomáticos correspondientes, la información detallada sobre esta decisión para tomar las acciones que correspondan. Mientras que el ministro de Justicia, César Siles, anunció que la medida de Milei “es vulneratoria de los principios más elementales de la convivencia pacífica en el nivel internacional” y que “iría en contra de los tratados internacionales”.