Estados Unidos
¿Por qué mataron a Charlie Kirk? Las claves del asesinato del polémico activista político que sacude Estados Unidos
El mundo se vio sacudido esta semana con el asesinato del activista de derecha Charlie Kirk, a quien le dispararon frente a decenas de personas. Con la política de luto, las preguntas por el atentado rondan por doquier.
Léenos en Google Discover y mantente un paso adelante con SEMANA


Veinte minutos después del mediodía, la charla del activista político de la derecha estadounidense Charlie Kirk, en la Universidad del Valle de Utah, fue interrumpida por un tiro mortal. El disparo al republicano lo hizo un francotirador aproximadamente a una distancia de 130 metros. En cuestión de minutos se hicieron virales las escabrosas imágenes, en las que se veía la sangre saliendo del cuello de Kirk entre decenas de espectadores horrorizados que huyeron de inmediato del lugar.
Del sospechoso, hasta el cierre de esta edición, se sabe poco. Después del tiroteo, una persona mayor fue señalada como posible involucrada en los hechos y arrestada, pero fue puesta en libertad luego de ser investigada e interrogada por el FBI. Los focos señalan a otra persona que, en videos compartidos por redes sociales, aparece escalando los tejados del claustro universitario y, posterior al disparo, la vieron huyendo en medio del caos por el asesinato.
Las autoridades estadounidenses han lanzado una verdadera cacería contra el hombre señalado de asesinar a Kirk y ofrecen más de 100.000 dólares para quien pueda brindar información que permita su captura. Mientras tanto, el mismo FBI publicó las imágenes de cámaras de seguridad en las que se ve al supuesto sospechoso caminando con un jean azul, un buzo negro con la bandera de Estados Unidos y un águila calva estampada, junto con gafas oscuras y gorra gris.

Kirk siempre ha sido una figura polémica en la política estadounidense. Empezó a hacerse conocido por ser el fundador y director ejecutivo de Turning Point USA (TPUSA), una organización juvenil conservadora que creó en 2012, cuando tenía apenas 18 años, para que los estudiantes de distintas universidades reportaran a los profesores que difundían la “ideología izquierdista”.
Con Trump en el poder, se convirtió en uno de sus defensores más visibles entre los jóvenes. Participó en eventos en la Casa Blanca, organizó conferencias con figuras influyentes del trumpismo y fue un puente clave entre el movimiento MAGA y la juventud conservadora. Terminó de consolidar su popularidad en pódcast y noticieros republicanos, además de sus debates en los que lanzaba afirmaciones polémicas en campus universitarios, retaba a estudiantes a refutarlas y difundía los choques en redes para viralizar su mensaje conservador.
En cuanto a su ideología, Kirk era un defensor acérrimo de la economía de libre mercado, enemigo del socialismo y cualquier ideología de izquierda. Sostenía que Estados Unidos es la mejor nación del mundo y debe proteger su soberanía. Promovía la familia tradicional, se oponía al aborto y rechazaba la agenda de género y las políticas trans. Además, profesaba un apoyo irrestricto a las leyes de posesión libre de armas, uno de los temas más controversiales durante su carrera.

Como muestra, Kirk había declarado que las muertes por armas de fuego eran un precio que se paga para evitar muchos otros delitos y proteger los derechos de los estadounidenses. Dicho debate era el que se llevaba mientras fue víctima del atentado en su contra. En discusión con un estudiante, Kirk aseguraba que había habido muchos tiradores transgénero que mataron personas, a lo que se le respondió que solo habían sido diez, mientras se le preguntó si sabía cuántos tiroteos masivos ocurrieron en Estados Unidos en los últimos tiempos. Segundos antes del disparo que cegó su vida, el activista solo refutó: “¿Contando la violencia de las bandas o sin contarla?”. Fueron sus últimas palabras.
Mientras las autoridades buscan al presunto autor del crimen, se han difundido distintas teorías de por qué fue asesinado. Los primeros indicios muestran que fue un crimen político contra uno de los activistas de derecha más cercanos al presidente Donald Trump, quien también mostró su indignación por el crimen y destacó al fallecido hombre de 31 años. “Charlie fue un gigante de su generación... una inspiración para millones de personas”, dijo el mandatario.
Reportes de medios de comunicación como The Telegraph y el Wall Street Journal difundieron que las autoridades encontraron munición con expresiones grabadas de “ideología transgénero y antifascista” dentro del rifle que, según se afirmó, se utilizó en el atentado contra Charlie Kirk. Sin embargo, otros funcionarios advirtieron a los periodistas que no se debían sacar conclusiones aún, a la espera de más información oficial.

Los primeros datos indicaron que se descubrió un antiguo modelo de rifle de caza calibre 30, encontrado en el bosque cercano al lugar del tiroteo del miércoles en la Universidad del Valle de Utah. Este estaba envuelto en una toalla con un cartucho usado aún en la recámara. Se dice que también había tres cartuchos sin usar en el cargador, todos con una inscripción política contra las ideas políticas de Kirk.
Dichas inscripciones de parte del tirador a favor de las personas transgénero muestran un posible motivo del asesinato de Charlie Kirk apenas dos semanas después de la muerte de dos niños en Minneapolis: un tiroteo masivo llevado a cabo por un atacante transgénero en una iglesia católica, que dejó, además, 21 heridos. El tirador también difundió mensajes en sus redes que incluían frases antisemitas, anticatólicas, racistas y declaraciones contra Donald Trump.
Este asesinato forma parte de un contexto de ataques contra figuras políticas en Estados Unidos y el mundo. Por ejemplo, el año pasado, durante un mitin de campaña, Donald Trump se salvó de un disparo de un francotirador por tan solo centímetros y meses después se evitó otro ataque contra su vida. Hace solo unos meses, dos legisladores estatales fueron víctimas de atentados, terminando con la vida de la demócrata Melissa Hortman, mientras que John Hoffman, en otro episodio, logró sobrevivir a los disparos. En otros hechos en el planeta, se recuerdan los crímenes de los aspirantes presidenciales Fernando Villavicencio en Ecuador en 2023 o Miguel Uribe Turbay en Colombia este año.

Por ahora se esperan los resultados de la búsqueda del sospechoso y la investigación derivada de las autoridades. Mientras tanto, la clase política, tanto demócratas como republicanos, ha lamentado el asesinato del activista de derecha de 31 años. Aseguraron que, más allá de cualquier diferencia, había que respetar su vida por encima de todo. Recordaron, además, que el hombre estaba casado desde 2021 y tenía una hija de tres años y un hijo de poco más de un año.
Los expresidentes Joe Biden y Barack Obama mostraron su indignación por el hecho. “No hay cabida en nuestro país para este tipo de violencia. Debe terminar ya. Jill y yo estamos rezando por la familia y los seres queridos de Charlie Kirk”, dijo Biden. Por su parte, Obama manifestó: “Aún no se conocen los motivos de la persona que tiroteó y mató a Charlie Kirk, pero este tipo de violencia despreciable no tiene cabida en nuestra democracia”.
El presidente Trump ha señalado a sus opositores políticos de ser los responsables del asesinato de Charlie Kirk. “Durante años, aquellos en la izquierda radical han comparado a maravillosos estadounidenses como Charlie con nazis y los peores asesinos en masa y criminales del mundo”, sentenció el mandatario. Calificó que el atentado era “un momento oscuro para Estados Unidos” y le dará la Medalla Presidencial de la Libertad al fallecido activista.

En redes sociales, miles de personas han mostrado su dolor por el asesinato. Etiquetas como #CharlieKirk, #JusticeForCharlie, #EndPoliticalViolence y #ProveMeWrongTour han sido tendencia durante los últimos días. En paralelo, cuentas conservadoras usaron la frase “Charlie vive en nosotros” como lema de resistencia. Mientras que los seguidores de Kirk lo enaltecen como mártir de los conservadores, algunos sectores críticos lo recordaban como un agitador polémico.