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Sacerdote indignado por votantes que optaron por Lula abandonó la misa que estaba oficiando. | Foto: Getty Images

Brasil

Video | Polarización en Brasil: sacerdote detuvo misa enojado porque una feligrés votó por Lula

Ante el apoyo recibido por la asistente, el sacerdote dejó ‘botada’ la celebración. Sus superiores se manifestaron enojados y pidieron excusas por lo acaecido.

8 de noviembre de 2022

En medio de la marcada polarización y división política que ha marcado a Brasil en los últimos meses por cuenta de las elecciones presidenciales; situación que ha estallado de forma violenta incluso tras declararse el triunfo en las urnas del ahora presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva sobre el actual mandatario, Jair Bolsonaro, el pasado lunes, 7 de noviembre, se presentó un nuevo hecho que despierta la indignación de varios sectores en el país.

Si bien un elevado número de simpatizantes de Bolsonaro se niega a reconocer el triunfo de Lula, e incluso protagonizaron violentas protestas y bloqueos en las vías, otro sector de los simpatizantes, ha llevado ese descontento a su esfera particular.

Si bien la semana anterior se conoció el caso de una docente bolsonarista que pidió a un grupo de estudiantes de doctorado retirarse de su clase por haber apoyado a Lula, ese escenario ahora se tomó también un templo religioso.

El hecho sucedido, que además quedó consignado por uno de los asistentes a la misa, sucedió la tarde del pasado lunes, cuando al interior de una parroquia conocida como Iglesia Matriz Inmaculado Corazón de María en el municipio de Nerópolis, en la región Goiania, estado de Goiás, en el centro de Brasil, el sacerdote a cargo de la ceremonia litúrgica, emprendió una discusión con una de las asistentes por temas políticos.

No obstante, en el lugar, la feligrés no se encontraba ‘sola’, y contrario a lo imaginado por el sacerdote, abiertamente simpatizante de Bolsonaro, ella encontró eco en más personas de la concurrencia.

Mientras el sacerdote arremetía contra Lula con su discurso, un grupo de feligreses comenzaron a hacer con su mano la letra ‘L’, símbolo que durante la pasada campaña fue usado masivamente por los simpatizantes del ahora presidente electo para expresar su respaldo.

En medio de ese contexto, el sacerdote, visiblemente enojado, elevó la voz para pedir a todos los simpatizantes de Lula que se retiraran del templo.

No obstante, la resistencia de los asistentes elevó aún más el malgenio del sacerdote, un hombre identificado como Danilo Neto, quien optó por entonces abandonar la misa él.

Mientras se despojaba de su casulla, alba, estola y demás ornamentos propios de la vestimenta de los religiosos al momento de oficiar ceremonias litúrgicas, el sacerdote seguía expresando su descontento contra quienes habían optado por votar por Lula.

“¿Y? Entonces bien. Ustedes no precisan de un cura. Entonces, voy a dejar la parroquia”, se escucha decir en portugués al religioso mientras se despoja de sus ornamentos sacramentales y sale por una puerta lateral hacia un espacio que se presume es la sacristía de la iglesia.

Tras lo sucedido, y en tanto el hecho quedó consignado en un video grabado con un celular desde la concurrencia a la misa, este se comenzó a difundir a través de las redes sociales, donde la actuación del sacerdote despertó reacciones encontradas, e incluso suscitó que los superiores del religioso se pronunciaran para condenar la actitud del religioso, Danilo Neto.

En ese sentido, medios locales citan un comunicado emitido por la misma Diócesis de Anápolis, a la que está adscrita esa parroquia, desde donde los superiores del religioso condenaron y lamentaron lo ocurrido afirmando que el actuar de este no fue el correcto.

“La Diócesis de Anápolis lamenta profundamente el episodio ocurrido durante la celebración de la Santa Misa el 6 de noviembre en la Parroquia Inmaculado Corazón de María en Nerópolis”, advierte el comunicado, en el que también se cita las palabras del correspondiente obispo del sector, advirtiendo que este tomará medidas por lo acaecido.

En su comunicado, la iglesia Católica en Brasil refirió nuevamente que la institución no tiene una posición política partidaria, condenando cualquier caso de intolerancia.