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Video: reverenda tomó el micrófono en una misa y criticó a Trump en pleno sermón; el presidente reaccionó al incómodo momento
La obispa Mariann Budde protagonizó un incómodo momento para el mandatario al hablar de inmigrantes ilegales e ideología de género.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, vivió un momento incómodo durante la celebración de una misa, cuando se vio obligado a escuchar a una obispa pronunciar un sermón en el que lo criticaba y le pedía que mostrara misericordia hacia los inmigrantes ilegales y los niños transgénero.
“Le pido que tenga piedad de la gente de nuestro país que ahora está asustada. Hay niños gays, lesbianas y transexuales en familias demócratas, republicanas e independientes, algunos de los cuales temen por sus vidas”, dijo la obispa episcopal Mariann Budde.
El hecho ocurrió el primer día de Trump como presidente, cuando la reverenda tomó el micrófono y pronunció un sermón incómodo para el mandatario y parte de su familia, quienes se encontraban presentes.
Wow. Bishop Mariann Edgar Budde fearlessly calls out Trump and Vance to their faces. This is heroic. pic.twitter.com/igyKzC8dRo
— MeidasTouch (@MeidasTouch) January 21, 2025
El mandatario estadounidense se mantuvo sentado con una expresión tranquila en primera fila junto a su esposa, Melania Trump, mientras Budde le decía que los inmigrantes ilegales no eran criminales y que no debería deportar a aquellos con niños.
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La obispa, de 65 años, expuso su discurso desde el púlpito durante un servicio tradicional de oración inaugural en la Catedral Nacional de Washington.
“Las personas que recogen nuestros cultivos y limpian nuestros edificios de oficinas, que trabajan en granjas avícolas y plantas empacadoras de carne, que lavan los platos después de que comemos en los restaurantes y trabajan en los turnos de noche en los hospitales, puede que no sean ciudadanos o no tengan la documentación adecuada”, aseveró.

“La gran mayoría de los inmigrantes no son criminales. Le pido, señor presidente, que tenga piedad de aquellos que viven en comunidades cuyos hijos temen que les quiten a sus padres”, continuó diciendo.
El presidente observaba atentamente el sermón de la obispa y después se le vio fatigado tras un arduo día de posesión, en el que asistió a diferentes eventos, incluyendo algunos protocolarios hasta altas horas de la noche.
Trump se negó a criticar públicamente a la obispa por su sermón; sin embargo, cuando los periodistas de la Casa Blanca le preguntaron sobre el servicio, Trump dijo: “¿Qué les pareció? ¿Le gustó? ¿Le pareció emocionante? No fue demasiado emocionante. Creo que fue un gran servicio”, dijo.
🚨JUST ANNOUNCED: President Trump's response to the National Prayer Service's woke episcopal bishop sermon:
— AJ Huber (@Huberton) January 21, 2025
“Mr. President, what did you think of the sermon?”
“What did you think? Did you find it exciting? Was not too exciting, was it?”pic.twitter.com/3fnupZQDlq
El presidente Donald Trump ha implementado una serie de medidas en las últimas horas para intensificar las deportaciones en Estados Unidos, como por ejemplo, declaró la emergencia nacional en la frontera. Esta medida permite redirigir fondos militares para la construcción de más muros fronterizos y el despliegue de tropas en la zona.
Los solicitantes de asilo deben esperar en México mientras se procesan sus casos en Estados Unidos, y busca eliminar el derecho automático a la ciudadanía para los nacidos en territorio estadounidense.