“Proyecto del Hospital San Juan de Dios no se puede detener”: llamado del concejal Acevedo al gobierno Petro

El concejal de Bogotá, por el partido Liberal, Álvaro Acevedo, hizo un llamado al Gobierno nacional y distrital para que se inicien las obras del Hospital San Juan de Dios en la capital del país en sus diferentes estructuras, y principalmente para que no se frene el proyecto diseñado para sustituir la Torre Central del antiguo complejo hospitalario.

Acevedo enfatizó su compromiso con el San Juan de Dios tras ser uno de los defensores del centro hospitalario que cerró sus puertas desde el año 2001.

“Desde el Concejo de Bogotá apoyé la aprobación de nuevos recursos para recuperar y construir fases fundamentales del San Juan de Dios, la cifra que aprobamos en años anteriores ascienden a los más de 500 mil millones de pesos, dichos recursos contaron con mi apoyo y aprobación, teniendo en cuenta que fui el coordinador ponente de dicha iniciativa que garantizaría la construcción de estructuras para fortalecer este centro hospitalario considerado el más emblemático en el desarrollo de la medicina en Colombia”, resaltó Acevedo.

El concejal Álvaro Acevedo llamó al gobierno nacional y distrital a hacer un compromiso con la ciudadanía para que el proyecto de recuperación no se detenga y siga adelante, teniendo en cuenta que desde el concejo de la ciudad se logró comprobar que la torre central del San Juan de Dios se encuentra en situaciones obsoletas que necesitan una intervención inmediata.

El llamado especial de Acevedo se da luego de la petición que hizo al gobierno saliente, la hoy ministra de Cultura, Patricia Ariza, días antes de posesionarse en su cargo, para que no intervinieran el hospital San Juan de Dios.

El pronunciamiento de Ariza se dio después de una carta que el concejal de Bogotá, José Cuesta Novoa, le envió a ella solicitándole mediar para frenar la demolición de la Torre Central del Complejo Hospitalario San Juan de Dios.

“Nos permitimos solicitar a usted, en su calidad de ministra de Cultura designada, proteger el Edificio Central del Hospital San Juan de Dios, declarado Patrimonio Cultural de la Nación y que hoy se encuentra en riesgo de ser demolido por decisión de la alcaldesa de Bogotá D.C., quien otorgó a la Firma Copasa un contrato de Concesión para construir sobre el San Juan de Dios la Nueva UPME Santa Clara”, aseguró el cabildante de la Colombia Humana en la misiva.

Ariza dio a conocer que acogió la petición del concejal Cuesta y le pidió al gobierno saliente no intervenir el hospital, pues este proyecto es de suma importancia para el gobierno del presidente Gustavo Petro.

“Hemos informado al gobierno saliente, a la señora ministra de Cultura y al Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, de la situación actual del Hospital San Juan de Dios. En primer lugar, que el presidente electo Gustavo Petra Urrego está comprometido con el proyecto de rehabilitación y reapertura del San Juan de Dios como Hospital Universitario de muy altas calidades científicas y médicas”, afirmó Ariza en un primer momento en una carta abierta publicada en su cuenta de Twitter.

Ariza dejó claro que “nos interesa analizar y revisar una vez más el proceso en curso para darle cumplimiento a lo que ordena la ley”.

En ese orden de ideas, el nuevo gobierno revisará detalladamente este proyecto y estará en la nueva ministra de Cultura la decisión final sobre el visto bueno para la demolición de esta estructura.

La Empresa de Renovación Urbana adelanta en la zona la intervención a cinco edificios patrimoniales que hacen parte de los 24 edificios que tiene el Complejo Hospitalario San Juan de Dios, pero la construcción de la Nueva UPME Santa Clara, en donde hoy está la torre central, es un proyecto a cargo de la Subred Centro Oriente. No obstante, a la fecha el proyecto no ha podido avanzar por la falta de permiso para la demolición de esa torre central.

Para el concejal Emel Rojas, de frenarse la autorización en el gobierno Petro para la demolición de la torre central, frenaría por completo este proyecto en específico.

“En el caso puntual, la torre debe demolerse; de lo contrario se pondrá un palo en la rueda para el avance de este proyecto. Esa torre debe seguir en construcción porque lo que se estaría haciendo es paralizar el desarrollo de la ciudad y se afectaría el complemento de la salud de los bogotanos”, dijo Rojas en diálogo con SEMANA.