“La coalición oficialista es débil, vulnerable y espera el momento para abandonar el Gobierno”: la advertencia de Duvalier Sánchez

SEMANA: ¿Qué ruta decidió tomar la Alianza Verde frente a la reforma a la salud?

Duvalier Sánchez (D.S.): Vamos a explorar conjuntamente tres alternativas. La primera es revisar el documento que no se conoce porque es el que se ha venido trabajando con las bancadas de los partidos tradicionales. Por supuesto, nosotros consideramos que tenemos aportes para hacerle e inquietudes. Tenemos que ver si en el documento nos sentimos recogidos o si como bancada le hacemos recomendaciones al Gobierno. De no poderse, entonces el doctor Humberto de la Calle ha presentado un documento, una propuesta de articulado para un proyecto nuevo. El tercer camino es una ponencia alternativa que recoja lo que decimos nosotros y los demás voceros de los partidos. Eso fue lo que se acordó, va a haber otra reunión la próxima semana con la bancada para construir los puntos de cada uno en el documento.

SEMANA: ¿Cuáles son las líneas rojas de la Alianza Verde en la reforma a la salud?

D.S.: Lo primero es garantizar que el sistema va a ser integral y que no habrá traumatismos en la prestación del servicio. Es decir, queremos conocer con claridad que las personas van a tener garantía del acceso a la salud mientras se implementa la reforma, que ahí hay algunas preocupaciones nuestras que todavía no tenemos suficientemente claras. ¿Quiénes van a asumir el papel si no van a estar las EPS? Tienen que seguir prestando los servicios del agenciamiento, la articulación de la red, la gestión del riesgo, el pago de incapacidades, licencias de maternidad y la gestión farmacológica. Son cosas que no pueden parar, no se puede pausar el sistema.

Lo otro es que la reforma no plantea una planificación de los profesionales de la salud adaptada a las necesidades de la población. Es decir, si por cada 20.000 o 25.000 habrá un centro de atención primaria en salud, queremos tener la certeza de que hay personal para atender esa expectativa que se crea. Otro punto que nos parece a nosotros es si se va a contemplar un sistema mixto, ¿cuáles van a ser las modificaciones a las EPS? Porque todos creemos y consideramos que, a través de esa administración de los recursos, sí ha derivado en problemas de corrupción y deficiencias en la calidad de prestación de servicios. ¿En ese régimen de transición se concibe que las EPS que hagan bien su labor se queden? ¿En qué condiciones se van a quedar?

Por último, el Adres, la entidad administradora del fondo de los recursos de la salud. Considero que no , y es una postura más personal, no creo que deba contratar bajo el régimen privado, sino que se acoja para todas las adquisiciones y servicios que contrate a través del estatuto general de contratación pública.

SEMANA: Frente a sus reparos con respecto a la reforma a la salud, ¿el Gobierno los ha convocado para hablar sobre el proyecto?

D.S.: Hemos tenido un espacio con el presidente y una mesa técnica con la ministraHa abierto algunos espacios para conversar, pero ante el pronunciamiento y la resistencia de los partidos tradicionales, sentimos que quedamos excluidos quienes de verdad queremos y creemos en la reforma a la salud. Queremos que sea buena. Con criterio a partir de lo que hemos recogido de las universidades, la academia, los colegios de médicos y con el personal de salud. Pero el Gobierno le dio vocería, quizás, a personas que han participado de la política y que han tenido cuestionamientos ligados a su interferencia en el manejo de los recursos de la salud, como es la doctora Dilian Francisca Toro en el Valle del Cauca. Aquí en la región es la vocera de la reforma. Muchos de los políticos que el Gobierno ha decidido escuchar y les ha dado vocería para recoger recomendaciones son los verdugos del sistema de salud. Quienes han contribuido a muchos de los malos manejos, hoy se presentan como salvadores. Pedimos que incluyan a la bancada Verde Centro Esperanza, que nuestro deseo genuino es mejorar la reforma, no defender intereses particulares.

SEMANA: ¿Cómo cree que ha sido el nivel de interlocución de Carolina Corcho?

D.S.: Entiendo que se modificó el documento en el trabajo con los partidos. El asunto es que hay una situación compleja y es que una reforma es para reformar. El problema que se tiene es que la actual administración de los recursos derivaba en otros gastos que no necesariamente garantizaban una mejora y calidad de la atención a los usuarios en Colombia. Ese es el cuello de botella, el rol de las EPS. Que jueguen un rol, pero no pueden ser juez y parte. Lo complejo ha sido que de un lado no quieren tocar las EPS y del otro las han querido relegar y desaparecer. Acercar esas posturas desde qué funciona, cuál es el rol de las EPS y cómo reducir los riesgos de corrupción es lo que queremos en la Alianza Verde.

¿Qué ha distanciado al Gobierno y a los partidos tradicionales? Es que seguramente unos quieren dejar las cosas como están y no están convencidos ni del Gobierno ni de la reforma. Tenemos una coalición de Gobierno un poco hipócrita porque no hay convicción de las reformas y cuando se sientan a modificarlas, es en función de que nada cambie o que cambie muy poco. Creo que hay que despersonalizar. La ministra tiene un carácter, pero los problemas del sistema de salud no son del carácter de la ministra, son problemas de corrupción en el sistema. No nos deberíamos centrar en la personalidad de la ministra.

SEMANA: ¿Por qué dice que es una coalición un poco “hipócrita”? ¿Las reformas corren peligro?

D.S.: El presidente y el gabinete tendrán que tomar una decisión. Es si logran entender que las reformas no van a salir tal como las quieren y que los partidos tradicionales, de los cuales dependen para poderlas pasar, van a querer moderarlas tanto como se pueda o si va a intentar presionar de manera más fuerte, radicalizarse y buscar respaldo en la opinión, aunque las reformas se le caigan en el Congreso. Es una decisión que tendrá que tomar el presidente y es difícil y desafiante para él.

Lo que ha pasado es que los primeros que salen a criticar las reformas que se presentan son los mismos de la coalición, especialmente de los partidos tradicionales. Están por cálculo, por interés, y no por convicción en el Gobierno. Eso hace muy débil a la coalición. Incluso, cuando se le cae algo al Gobierno, lo celebra. ¿Cuándo se ha visto que una coalición celebra cuando le va mal al Gobierno que está apoyando? Creo que se tiene que definir la coalición. Están esperando las elecciones locales, para no verse perjudicados en términos de los puestos que tengan en el Gobierno, pero la decisión de muchos de estos partidos seguramente está tomada. Es probablemente saltar del barco y dejar de ser coalición de Gobierno. Eso va a acabar un poco con la ilusión del país de ver mejoras. En la mitad está el Verde, que quisiera, por supuesto, que las reformas le sirvan más al país que ideológicamente al Gobierno.

SEMANA: ¿Cree que la coalición tiene los días contados?

D.S.: Creemos que el Gobierno a veces se equivoca escuchando más a aliados que están allí por cálculos y por intereses que una bancada que genuinamente quiere apoyar al Gobierno y mejorarle sus proyectos. Debería darnos más amplitud de escucha a los Verdes Centro Esperanza. La coalición que tiene el Gobierno es débil, vulnerable y que espera el momento para abandonar al Gobierno. Celebra cuando le tumba cosas.