Definido el salario mínimo en Colombia para 2023, ¿desde cuándo aplica el aumento?

Este jueves finalmente llegaron a un acuerdo los voceros de las empresas y los gremios sindicales luego de varios días de negociaciones, y confirmaron que el salario mínimo en Colombia para 2023 quedará en 1.160.000 pesos.

De acuerdo con el presidente Gustavo Petro, la remuneración económica básica para los trabajadores en el país aumentará un 16 % el próximo año. Asimismo, señaló que el auxilio de transporte incrementará un 20 %, ubicándose en 140.400 pesos.

“El salario mínimo sube un 16 % y con el subsidio al transporte, que sube 20 %, queda en 1.300.000 pesos”, puntualizó el jefe de Estado cordobés en su cuenta de Twitter, donde ha estado muy activo.

El Gobierno nacional, liderado por la ministra Gloria Inés Ramírez, aprovechó el momento para puntualizar que este incrementó entrará en vigencia a partir de la primera quincena de enero del próximo año.

Igualmente, los voceros de las empresas indicaron que se pactó revisar las tasas de usura para lograr también un alivio al bolsillo de los hogares, que actualmente están sufriendo con el pago de créditos bancarios a intereses muy altos.

“Nos vamos muy satisfechos y contentos de haber podido de alguna forma haber sido parte de esta negociación y de plantear una metodología, que afortunadamente fue aceptada por el Gobierno y los representantes de los trabajadores”, expresó Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Industriales (Andi).

“Luego, el dirigente añadió: “Para Colombia, que ha tenido tantas polarizaciones, es muy importante ver que de alguna manera, los diferentes sectores de la sociedad pueden ponerse de acuerdo alrededor de cosas tan importantes. Nos pudimos poner de acuerdo”.

Mac Master también señaló, que el hecho de que la inflación para los hogares de ingresos bajos hubiese sido tan alta y que hubiese habido un peso tan alto en los alimentos y los arriendos, hizo que la propuesta de tener en cuenta esa realidad en la toma de decisiones hubiese generado una sensación de deber cumplido aún mayor.

“Cuando oímos la propuesta, abogamos porque se tuviera en cuenta y fuéramos conscientes de ello. Podemos llegar a acuerdos y dar discusiones complejas alrededor de mesas donde personas racionales y bien intencionadas están queriendo tomar la mejor decisión posible”, concluyó.

En medio de la mesa de conversaciones se aprobaron unas medidas complementarias al alza del salario mínimo: la desindexación de determinados productos y servicios, la manera de disminuir los costos de energía y solicitarle al Ministerio de Hacienda la disminución de la tasa de usura, entre otras.

Cabe recordar que antes de llegar a este consenso, por un lado, las centrales obreras propusieron un incremento del 20 %, pero el sector empresarial manifestó que debía ser del 13 al 15 %. Así las cosas, al parecer se encontró un punto medio antes del 30 de diciembre y se evitó que dicha decisión fuera expedida por decreto presidencial.

“La mesa tripartita de concertación ha adelantado acciones, para proteger que el salario mínimo pierda su poder adquisitivo, en virtud del incremento de los costos de diferentes elementos que afectan directamente el ingreso de los trabajadores”, sentenció la Presidencia de la República.