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Infidelidad en México
El enamorado llegó muy emocionado junto a su amigo a un aeropuerto en México para esperar a que su novia, llamada Azul. | Foto: TikTok: @eliasps.2.0

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Llegó al aeropuerto para recibir a su novia y se enteró de que en realidad era el amante

El enamorado llegó muy emocionado junto a su amigo a un aeropuerto en México para esperar a su novia, pero saldría de allí con el corazón roto.

10 de febrero de 2023

Un nuevo “soldado caído”, así califican a un joven que se hizo viral en redes sociales luego de que su perspectiva del amor diera un giro tras descubrir de manera inesperada que su novia lo engañaba con otro hombre. Todo quedó grabado.

El enamorado llegó muy emocionado junto a su amigo a un aeropuerto en México para esperar a que su novia, llamada Azul, desembarcara de un vuelo. Con flores en mano, el joven no veía la hora de abrazar y expresarle sus sentimientos a su chica.

Sin embargo, previo al encuentro, ambos hombres se empezaron a percatar de que algo no andaba bien. A una distancia considerable se podía observar a otro chico con un cartel en colorido que decía “bienvenida azul, te amo”, acompañado de un globo de helio.

"Bienvenida Azul, te amo"
“Puede ser su hermana o su mamá, güey hay mucha gente en el aeropuerto”, señaló el amigo del enamorado con el objetivo de evitar los malos pensamientos. | Foto: TikTok: @eliasps.2.0

Puede ser su hermana o su mamá, güey hay mucha gente en el aeropuerto”, señaló el amigo del enamorado con el objetivo de evitar los malos pensamientos.

A pesar de ello, llegó el momento de la verdad, Azul apareció por la puerta de salida y salió corriendo hacia los brazos del hombre con aquel colorido cartel. Mientras tanto, su novio junto al amigo se quedaron intentando identificar a la chica.

Resultó que ambos jóvenes estaban esperando a la misma Azul, “güey no manches, es tu vieja, es que sí se perece”, a lo que su ya golpeado amigo respondió “sí es güey, sí es”.

Azul y su novio
Ante la tristeza e indignación, ambos se acercan a Azul y a quien sería su novio, para preguntar sobre lo que estaba sucediendo. | Foto: TikTok: @eliasps.2.0

Entre el momento de tensión copado de reclamos entre todos, se escucha a Azul decir: “¿No te da vergüenza?, ya lo conoces, yo ya no te amo”, fueron las palabras a su ahora exnovio.

Tanto Azul como su novio se marchan, mientras el “soldado caído” recibe algo de ánimo de parte de su amigo que en ningún momento dejó de grabar. El video se hizo viral en redes sociales y ya cuenta con más de 15 millones de reproducciones.

El divertido ‘blooper’ de una reportera y su camarógrafo mientras grababan un informe

Cuando un periodista y su equipo de producción salen a la calle a realizar trabajos de reportería es factible vivir situaciones divertidas, peligrosas y vergonzosas. Una reportera en España vivió junto a su camarógrafo uno de los momentos más divertidos de su carrera.

El curioso hecho que es la sensación en redes sociales se presentó en el metro de Madrid, más exactamente en la estación Plaza de Castilla.

La periodista de Informativos Telecinco, Sandra Mir, compartió el video por medio de sus redes sociales, donde se puede ver cómo tuvo que separarse de su camarógrafo luego de que este se quedara atrapado en un vagón mientras ella se encontraba hablándole a la cámara parada en una de las plataformas de abordaje.

Sandra Mir
Sandra Mir se encontraba grabando un informe sobre el final de la norma que obligaba a los ciudadanos a utilizar tapabocas en el metro. | Foto: Twitter: @sanmima

Todavía me parto de risa con lo que nos pasó ayer... ATENTOS AL FINAL”, escribió la comunicadora social en su cuenta de Twitter.

Sandra Mir se encontraba grabando un informe sobre el final de la norma que obligaba a los ciudadanos a utilizar tapabocas en el metro. Por lo que ambos ingresaron momentáneamente a uno de los vagones que recién llegaba, entraron por una de las puertas, pero no lograron salir juntos.

Mientras Mir continuaba entregando la información, salió en primer lugar a la plataforma, pero cuando su camarógrafo se dirigía a la misma salida las puertas se cerraron. La reacción de la periodista fue decir “¡Ay, mier...!” y ponerse la mano en el rostro.

Mientras tanto, el camarógrafo tuvo que recorrer la ciudad en solitario hasta la próxima estación y buscar la manera de reencontrarse con su equipo.