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Gina Osuna embarazada y a la espera de la pequeña Madeleine
Gina Osuna embarazada y a la espera de la pequeña Madeleine | Foto: Gina Osuna embarazada y a la espera de la pequeña Madeleine

BOGOTÁ

La extraña muerte de Gina Osuna y su bebé recién nacida en el Hospital de Kennedy

El esposo de la mujer pide justicia por la muerte de su esposa y su pequeña hija.

21 de abril de 2021

El pasado jueves 15 de abril, Gina Osuna, de 32 años de edad, ingresó al Hospital de Kennedy, ubicado en el suroccidente de Bogotá, para ser hospitalizada porque su bebé estaba a punto de nacer. Pero ni ella ni su esposo, Víctor Quintero, pensaron que esa sería la última vez que se verían y mucho menos imaginó él que ni siquiera lograría conocer a la pequeña que con tanta ilusión habían esperado.

Según Víctor, cuando llegó al hospital no se le permitió el ingreso por las restricciones de la pandemia. Dice que su esposa estuvo por cuatro horas en la sala de espera y logró hablar con ella a través de una llamada. Le dijo que tenía miedo de que le hicieran una cesárea por lo difícil que podía ser la recuperación y después de esta hubo varias llamadas más, muy cortas para no agotar la batería, pero en todas Gina decía que todo iba bien.

Dice Víctor que su esposa le dijo aproximadamente a las 2:00 de la tarde, en otra llamada, que le habían dado un medicamento para acelerar el parto, pero que aún no sentía nada. Horas más tarde le dieron otra pastilla igual y entre las 7:00 u 8:00 de la noche comenzó a sentir las primeras contracciones de manera leve. La última llamada que recibió de su esposa fue a las 10:00 de la noche. Gina le dijo que la bebé se estaba moviendo y que ahora sí habían funcionado las pastas que le habían dado. Víctor le pidió que lo siguiera llamando, pero no hubo más contacto, por lo que pensó que se debía a que ya había entrado en trabajo de parto.

El viernes 16 de abril volvió a sonar el celular a las 7:00 de la mañana: era su esposa, quien le informaba que aún la bebé no había nacido. La conversación fue corta. En ella, Gina le dijo que sentía mal y con mucho dolor. Víctor le manifestó que eso era porque ya iba a nacer la pequeña y que pronto podrían salir de allí. La mujer dijo que no tenía ganas de hablar más y que lo llamaba más tarde.

Gina Osuna  y Víctor Quintero
Gina Osuna y Víctor Quintero | Foto: Gina Osuna y Víctor Quintero

En horas del mediodía recibió otra llamada, pero esta vez no era su esposa, sino del hospital, en la cual le decían que estaban en emergencia con Gina porque debido al parto había presentado una hemorragia y tenían que sacarle la matriz, que él debía ir urgente al hospital. Víctor preguntó por su hija y le dijeron que estaba bien, que se encontraban en la unidad de neonatos.

Al llegar, entró sin complicaciones al hospital y cuando llegó al segundo piso encontró a varios médicos hablando. Uno de ellos se acercó y le dijo que su esposa había muerto y, cuando preguntó por la niña, le dijeron que también lo sentían. Al escuchar esto, Víctor enfatizó que alguien lo había llamado y le había dicho que la pequeña estaba bien y que se encontraba en neonatos, pero la respuesta del personal médico fue que le habían dicho eso para no preocuparlo. El hombre entró en cólera y desespero y dijo que estaban jugando con él.

La explicación de los médicos a Víctor fue que el líquido amniótico se había ido a los pulmones de la bebé mientras su madre pujaba, lo que había hecho que la pequeña entrara en paro respiratorio. La intubaron, pero no resistió y falleció; le dijeron que era una situación muy extraña y que nunca les había pasado algo similar.

Víctor logró ver a su esposa, en una escena de terror y dolorosa, intubada y bañada en sangre, incluso rodeada de mucha sangre en el piso. Dice que la abrazó y le pidió a Dios que la acompañara; luego vio a su hija envuelta en una sábana, la quiso destapar, pero se lo impidieron.

Gina Osuna  y su bebé vivas después del parto
Gina Osuna y su bebé vivas después del parto. | Foto: Gina Osuna y su bebé vivas después del parto

Después de la dolorosa escena, Víctor llamó a sus familiares para darles la terrible noticia. Le entregaron las pertenencias de Gina, pero la sorpresa llegó al otro día cuando el hijo de Gina, de tan solo 12 años, encendió el celular y encontró una fotografía de su mamá y la bebé en perfecto estado. En ese momento las alarmas se encendieron y Víctor inició una lucha por saber la verdad sobre las razones de la muerte de su esposa. Dice él que sospecha que a su esposa la dejaron morir por negligencia y no entiende lo que pasó con su pequeña Madeleine, nombre que había escogido para la bebé.

Víctor dice que su esposa era una paciente con un embarazo de alto riesgo y que por esa razón tenía una orden de hospitalización, ya que lo más probable era que le hicieran una cesárea. Señala que no comprende por qué la indujeron a un parto natural e incluso dice que aún menos entiende que su hija haya aparecido en una foto, junto a su esposa viva. Agrega que emprenderá acciones legales contra del Hospital de Kennedy y llevará su caso ante la Fiscalía, la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio de Salud para que se investigue y se aclare lo que en realidad sucedió con su hija y su esposa.

Después de mucho luchar, Víctor logró que le entregaran los cuerpos de Gina y Madeleine, los cuales se encuentran en Medicina Legal.

Por su parte, el Hospital de Kennedy, a través de un comunicado, lamentó lo sucedido y dice que aportará la información necesaria que “las instancias requieran con la reserva y respeto a la intimidad personal y familiar que brinde la claridad que amerita la situación”. La Secretaría de Salud investiga lo sucedido en el hospital el pasado 16 abril.