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La historia de un joven vendedor de zapatos se convirtió en un abusador en serie de niños en Arauca.
La historia de un joven vendedor de zapatos que se convirtió en un abusador en serie de niños en Arauca. | Foto: Fiscalía

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La terrible historia de un joven vendedor de zapatos que se convirtió en un abusador en serie de niños

Un ciudadano en México observó un video con contenido sexual que incluyó niños en uniforme de colegio, identificó la institución y dio aviso a las autoridades en Colombia.

Redacción Semana
23 de julio de 2023

Niños en Arauca eran víctimas de abuso sexual y el responsable grabó la evidencia en su contra. Se trata de un vendedor de zapatos que se convirtió en violador y pornógrafo infantil. Los niños llegaban al sitio de trabajo de este presunto abusador, motivados por un juego en línea y donde el hombre, de apenas 23 años de edad, hacía algunos ofrecimientos.

Los niños, entre nueve y doce años edad, fueron abusados y en ese proceso grabados con el celular de su victimario. El supuesto violador les ofrecía “diamantes”, una especie de créditos virtuales en juego de roles en Internet, que se pueden comprar, pero que en este caso el presunto abusador adquiría para canjearlos por los tocamientos con los niños.

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El vendedor de zapatos, de acuerdo con la investigación, aprovechó los abusos para generar contenido que difundió, vendió y publicó en sitios web de pornografía. Esas publicaciones, justamente, fueron el inicio de una investigación que lideró la Fiscalía y que permitió descubrir los abusos, capturar al supuesto responsable y restablecer los derechos de los niños.

“La Fiscalía General de la Nación puso en evidencia a José David Ramos Robles, un presunto abusador sexual de niños, niñas y adolescentes señalado de divulgar por plataformas virtuales los videos de los distintos vejámenes a los que sometía a las víctimas”, explicó la Fiscalía tras lograr la captura del abusador.

Los videos con contenido sexual llegaron a México, un ciudadano observó que se trataba de niños que incluso estaban con los uniformes del estudio. Capturó algunos fotogramas y logró identificar el nombre del colegio, lo buscó por Internet y supo que estaba en un departamento colombiano.

“Los elementos de prueba indican que los registros audiovisuales eran compartidos en distintos países del mundo. En México, un ciudadano vio uno de los videos e identificó el uniforme de un colegio de Arauca, por lo que alertó inmediatamente a las autoridades internacionales”, señaló Harles Max Cortés, director Seccional Arauca.

Pero identificar el colegio que aparecía en los uniformes de los niños abusados era apenas el comienzo de la investigación. Agentes del Cuerpo Técnico de la Fiscalía se enfocaron en hacer el seguimiento y tratar de establecer el sitio donde ocurrían los abusos y los niños que fueron víctimas.

“El presunto agresor sexual invitaba a los menores de edad al almacén de zapatos en el que trabajaba para que participaran en un juego en línea. Con ese pretexto, al parecer, los inducía a desnudarse y los violentaba, al tiempo que transmitía o grababa lo que sucedía”, advirtió el director mientras entregaban detalles de la investigación.

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Posteriormente, fueron los menores víctimas de los abusos los que entregaron detalles de lo que ocurría al interior de este establecimiento ubicado en pleno centro del municipio de Arauquita y dedicado a la venta de zapatos, donde el presunto agresor trabajaba. Los menores explicaron de qué manera ocurrían los abusos y qué era lo que ofrecía su victimario.

“Un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Seccional Arauca lo presentó ante un juez de control de garantías y le imputó los delitos de actos sexuales abusivos con menor de 14 años, pornografía con menor de 18 años y utilización o facilitación de medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con personas menores de 18 años”, explicó la Fiscalía.

A pesar de que en la audiencia de imputación de cargos la Fiscalía presentó la evidencia de los abusos, que son justamente los videos que grabó y difundió a través de las plataformas virtuales, el presunto abusador no acepó su responsabilidad. La investigación continúa.