Usuario de un teléfono Android.
Revisar el teléfono de otra persona es un delito, no importa que se trate del equipo de la pareja. | Foto: AP

Tecnología

Tatequieto a los tóxicos: este es el lío que se ganaría quien le revise el celular a su pareja y exponga chats privados

Quienes comentan estas acciones podrían enfrentar un serio problema ante las autoridades.

24 de octubre de 2022

Actualmente, los teléfonos inteligentes se han convertido en prácticamente una extensión de las personas, pues estos dispositivos ejecutar diferentes tipos de tareas de corte laboral y académico. Pero estos equipos también se han transformado en un recurso para almacenar todo tipo de información íntima o confidencial que no debe ser vista por otras personas.

Por esta razón, es un muy común conocer historias sobre usuarios que han tenido serios problemas debido a que las fotografías, videos o chats comprometedores que guardaban en sus teléfonos fueron expuestos por otras personas. De hecho, en muchos casos sus propias parejas han sido quienes comparten dichos contenidos en redes sociales para hacer pública una infidelidad.

Sin embargo, muchos usuarios de dispositivos móviles y plataformas digitales desconocen que el revisar sin permiso la información guardada en el teléfono de otra persona, teléfono, representa un delito y por ende puede acarrear líos legales.

SEMANA habló con Jacques Simhon, socio de la firma de abogados CMS Rodríguez Azuero, quien explicó que la conducta anteriormente señalada representa un delito que se llama acceso abusivo a sistema informático.

Simon agregó que es indiferente que se trate del teléfono de la pareja o cónyuge y que tampoco importa si el teléfono está protegido por una contraseña que fue compartida voluntariamente. Además, recalcó que una persona puede dar autorización a otra para acceder a un equipo o sistema, y esa autorización puede tener limitaciones.

“Si presto mi celular para que alguien haga una llamada, no significa que pueda acceder a todos mis datos”, explicó.

Por su parte, Lorenzo Villegas-Carrasquilla, socio de CMS Rodríguez Azuero, precisó que el acceder sin autorización al teléfono celular de la pareja es una violación al derecho a la intimidad que se encuentra prohibido por la constitución.

¿Qué pasa si una persona expone en redes sociales chats que evidencien una infidelidad?

Jacques Simhon aclaró que esta práctica se configura como un delito de injuria y en temas como una infidelidad el delito no se elimina, pese a que se exponga un hecho que es verdadero. Caso distinto si se tratase de la revelación delito, como un acoso sexual o una agresión, puesto que esas comunicaciones no estarían protegidas.

“En el caso de que lo que se esté revelando sea un delito en sí mismo, inclusive si ha prescrito o no puede ser perseguido por alguna razón, se entiende como una comunicación no protegida. Este es el comúnmente denominado “escrache” en el que la víctima de violencia sexual o doméstica expone las comunicaciones con su victimario y hace pública su denuncia. En estos casos, la Corte Constitucional ha considerado que existe una especial protección a la víctima”, aclaró Simhon.

A su turno, Lorenzo Villegas también recordó que según la Constitución Política, las comunicaciones son inviolables y nadie, así sea la pareja engañada, puede acceder a estos chats y menos hacerlos públicos.

¿A qué tipo de sanción legal se expone alguien que revise los dispositivos de su pareja sin permiso?

Jacques Simhon precisó que una persona que haya cometido el delito de acceso abusivo puede ser castigada con 48 a 96 meses de prisión y 100 a 1.000 salarios mínimos de multa.

¿Qué sanción recibiría quien divulgue capturas de pantalla de conversaciones íntimas?

El delito de injuria, que el cual sería agravado por el uso de redes sociales, tiene una pena de prisión que va de 18 a 108 meses y una multa de 13.33 a 1.500 salarios mínimos.

¿Cómo aplican estás sanciones?

Según le explicó Jacques Simhon a SEMANA, las sanciones anteriormente reseñadas solo se pueden imponer en el marco de un proceso penal, tras una investigación por parte de la fiscalía, y un juicio en el que se protejan todas las garantías del acusado.

Además, indicó que este tipo de casos deben ser denunciados ante la Fiscalía General de la Nación. Un ciudadano puede hacer presencialmente la denuncia en una estación de policía, también se puede acudir mediante la página de la fiscalía o a través de abogado.