Las señales que lo obligan a cambiar las plumillas del limpiaparabrisas de inmediato: no espere a que ocurra un accidente

Las plumillas del limpiaparabrisas son uno de los elementos de seguridad más subestimados en un vehículo. A pesar de su pequeño tamaño, su correcto funcionamiento es esencial para garantizar una buena visibilidad durante la conducción en condiciones climáticas adversas.

Debido a esto los conductores deben tener claro cada cuanto se deben cambiar las plumillas e identificar las señales que indican que ha llegado el momento de reemplazarlas.

¿Qué son las plumillas y por qué son importantes?

Las plumillas, también conocidas como escobillas del limpiaparabrisas, son componentes fabricados en su mayoría de caucho y metal o plástico, cuya función principal es limpiar el parabrisas eliminando agua, nieve, suciedad y otros residuos. Su deterioro puede comprometer gravemente la visibilidad del conductor, lo cual incrementa el riesgo de accidentes.

Según Bosch Automotive, uno de los fabricantes líderes en componentes automotrices, las plumillas deben revisarse periódicamente para asegurar que mantengan un contacto uniforme con el parabrisas y así garanticen una limpieza efectiva.

¿Cada cuánto se deben cambiar?

La mayoría de los fabricantes y expertos en mantenimiento recomiendan cambiar las plumillas cada 6 a 12 meses, dependiendo de las condiciones climáticas y del uso que se les dé. Sin embargo, esto puede variar según el entorno donde se conduzca:

• En climas cálidos y secos, el caucho de las plumillas tiende a agrietarse más rápidamente por la exposición al sol.
• En zonas con mucha lluvia o nieve, el uso frecuente acelera su desgaste.
• El polvo, la sal de carretera y los residuos también influyen en su durabilidad.

Según la American Automobile Association (AAA), el 90% de los conductores no cambia las plumillas hasta que ya no funcionan correctamente, lo cual puede ser peligroso.

Señales de que es hora de cambiar las plumillas

Es importante prestar atención a ciertos síntomas que indican que las plumillas ya no cumplen su función de forma eficiente:

1. Rayas en el parabrisas: si al activar el limpiaparabrisas se observan líneas de agua que no desaparecen, es una señal clara de desgaste.
2. Ruido excesivo: un chillido al pasar sobre el vidrio indica que el caucho está reseco o agrietado.
3. Saltos o vibraciones: si la plumilla no se desliza suavemente, puede deberse a una deformación del caucho.
4. Pérdida de contacto con el parabrisas: esto puede deberse a que el brazo de la escobilla ha perdido tensión o a un daño estructural.

Consejos para alargar la vida útil de las plumillas

Aunque su reemplazo es inevitable, existen ciertos cuidados que pueden prolongar la vida útil de las plumillas:

• Limpiar regularmente el parabrisas y las propias plumillas con un paño húmedo.
• No usarlas en seco, ya que esto desgasta el caucho rápidamente.
• En invierno, evitar despegar las plumillas congeladas a la fuerza. Es preferible calentar el parabrisas primero.
• Revisar que el brazo del limpiaparabrisas ejerza una presión adecuada.

¿Es recomendable instalar plumillas genéricas?

Aunque existen plumillas universales en el mercado, lo ideal es utilizar las que recomienda el fabricante del vehículo. Las plumillas de marca han demostrado ofrecer un mejor rendimiento y durabilidad, según comparativas de sitios especializados como Consumer Reports y Autobild.