“En 2022 debe acabarse el papel en la justicia. Todo debe ser virtual”: abogado Francisco Bernate

Este lunes, SEMANA conversó con el presidente del Colegio de Abogados Penalistas de Colombia, Francisco Bernate, sobre los retos que tiene Colombia y su sistema judicial para 2022. Uno de ellos, tal vez el más discutido especialmente por los abogados en redes sociales, es el de la digitalización de la justicia.

Bernate señala que el Ministerio de Justicia, y en general toda la rama judicial, debe entender que el papel es algo “obsoleto” y que la virtualidad debe llegar para quedarse.

“Hemos tenido que insistir muchísimo en mantener la virtualidad porque varios de nosotros, los abogados, queremos que sí haya virtualidad. Y creemos, pero además demostramos con cifras, que la justicia ha funcionado mejor en tiempos de virtualidad. Eso no significa que no haya quienes les guste las audiencias a puerta cerrada, el papel, las audiencias que no se hacen, creen que es mejor el sello. Es un tema generacional, pero necesitamos avanzar. Por eso es clave la necesidad de fortalecer la virtualidad”, señala Bernate.

Bernate es uno de los penalistas más reconocidos en Colombia y por eso sus críticas en redes sociales en este tema han sido clave para avivar la discusión. Por ejemplo, en diálogo con este medio explica que la virtualidad implica una justicia más económica, pues no se hace necesario asumir los 500 millones de pesos que cuestan solamente los servicios públicos del Complejo Judicial de Paloquemao.

“Imagínense cuánto cuesta todo si agregamos todas las sedes del país. Y los conceptos de aseo, mantenimiento, vigilancia, fotocopiado y más. Es que los ciudadanos, por ejemplo, ya no pagan autenticación, fotocopiado, desplazamiento de una ciudad a otra. Hay más audiencias, se incrementaron en más de 229 %. Hasta 12 mil personas han seguido las audiencias en vivo y en directo. No podemos creerles a los románticos, a los que les gusta el papeleo”, dice Bernate.

SEMANA le preguntó por aquellas personas que trabajan en los juzgados y que con un total traslado a la virtualidad podrían quedar sin oportunidades: “No hay en el caso de la justicia personas que vivan del papel. Al contrario, el papel le hizo daño a la justicia, por el atentado contra el medioambiente, sino por la dificultad para mantener y custodiar tantos documentos. En el caso de la justicia digital, no solamente se contribuye a la racionalización de los recursos. El asunto es equilibrarlo con los horarios de trabajo”, señala Bernate.