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Torneo tenis Colsanitas en el Country Club. Imagen de referencia. | Foto: Esteban Vega

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Ni que fueran las de Federer: raquetas de tenis de $4 millones, el escandaloso contrato de Indersantander que está en la mira de la Procuraduría

El contrato de 260 millones de pesos tendrían un evidente sobrecosto. La Contraloría General ya tomó cartas en el asunto.

11 de diciembre de 2022

El director de general del Instituto Departamental de Recreación y Deporte de Santander (Indersantander), Pedro Belén Carrillo Cárdenas, y la asesora jurídica del mismo Instituto, Mayra Alejandra Téllez Romero, deberán responder ante la Procuraduría General por la entrega de un contrato de 260 millones de pesos para la compra de elementos en los programas de escuelas de especialización deportiva dirigido a niños y adolescentes de Santander.

En el contrato, celebrado el pasado 6 de mayo, se adquirieron raquetas de tenis por un valor de cuatro millones de pesos cada una, y bolas para la práctica de este deporte por 260 mil pesos por unidad.

La Procuraduría busca establecer si se presentó un sobrecosto en la adquisición de estos elementos deportivos, así como una evasión de los procesos de selección objetiva al evadir las formalidades que exige la ley 80 de 2002 para este tipo de contratación.

En las pesquisas se indica que, al hacer una valoración, la raqueta más costosa de este tipo está en un rango de $1′200.000 pesos, pero el tarro, que contienen tres bolas, no supera los $40.000. Frente a esto, la Procuraduría Regional de Instrucción de Santander busca determinar si el gerente de Indersantander y la asesora jurídica incurrieron en un detrimento público.

En la investigación preliminar, la Procuraduría General ordenó la práctica de pruebas documentales y testimoniales para establecer la ocurrencia de irregularidades, así como las circunstancias de tiempo, modo y lugar de los hechos. Igualmente, se evaluará si en el mencionado instituto se celebraron contratos similares.

La Contraloría busca pruebas

El millonario contrato también está en la mira de la Contraloría General que, en el transcurso de la semana, abrió una investigación fiscal contra el director de la entidad, Pedro Belén Carrillo Cárdenas, y contra el coordinador de deporte de alto rendimiento, Raúl Enrique Gutiérrez Torres.

De acuerdo con el órgano de control, se recibieron cuatro denuncias en las cuales se referenciaba el mismo contrato, 341 de 2022. Ante esta situación y mientras se adelanta el proceso de investigación fiscal, la Contraloría “solicitó al señor gobernador de Santander, Mauricio Aguilar Hurtado, la suspensión inmediata del ejercicio del cargo de director del Indersantander de Pedro Belén Carrillo Cárdenas. Así mismo, al Indersantander se solicitó la suspensión de coordinador de deporte de alto rendimiento de Raúl Enrique Gutiérrez Torres”, se lee en el comunicado emitido por la Contraloría.

Dicho contrato fue celebrado entre el Indersantander y la Corporación Soluciones Técnicas Agropecuarias y Ambientales (Sotea) y tiene como objetivo el “desarrollo e implementación institucional del programa de escuelas de especialización deportiva talento y reserva dirigido a niños, niñas y adolescentes del departamento, potencializando el talento santandereano acorde al plan departamental de desarrollo”.

Sotea es una entidad sin ánimo de lucro domiciliada en Quibdó, en el Chocó, en cabeza de Lewis Mosquera, quien se presentó como único interesado. El contrato tiene un valor $499,9 millones.

De acuerdo con el acta de ejecución, se compraron flotadores de cintura a $269.000, aletas de $592.000, tablas de natación de $240.000, balones de fútbol de $564.000, cascos de taekwondo de $4.550.000, raquetas de tenis de $3.870.000 y pelotas de $258.000. Todo esto, sumado a un gimnasio multifuerza de $20 millones, uniformes de $500.000, capacitaciones por $70 millones (que al parecer no se realizaron) y un entrenador de cada disciplina por $3 millones mensuales, entre otras cosas.

Tras la solicitud de la Contraloría, el mandatario de los santandereanos pidió la renuncia de Carrillo Cárdenas, con el propósito de evitar un detrimento al patrimonio de Santander.

“Indersantander es un instituto descentralizado, autónomo en sus decisiones administrativas y contractuales. Como Gobernador debo velar por los recursos del departamento y evitar el detrimento en las finanzas. Por eso, pedí la renuncia del hasta hoy director Pedro Carrillo”, dijo el mandatario departamental en su cuenta de Twitter.

Por su parte, el diputado santandereano, Luis Ferley Sierra, aseguró que todo este entramado de corrupción quedó al descubierto gracias a la denuncia que, inicialmente, hizo un entrenador vinculado al Indersantander.

“Hoy quiero resaltar al profe Miguel Arévalo, entrenador de Esgrima y quien me hizo saber las irregularidades que detectó en el Indersantander para hacer el debate. Un valiente que puso la dignidad por encima de su puesto. A él, mis respetos, su denuncia ya dio frutos”, expresó Sierra.