Lluvias no dan tregua: más de 500 árboles se han caído en Bogotá en lo que va del año

La Secretaría de Ambiente de Bogotá reveló que las fuertes lluvias y vientos de los últimos días han incrementado las emergencias por árboles en Bogotá y que en lo que va corrido de este año se han caído 522 árboles.

“Las lluvias de este año han estado inusualmente largas y prolongadas, los suelos tienen mucho contenido de agua, están saturados y las copas de los árboles también están saturadas y muy pesadas, eso es lo que ha ocasionado esos números desproporcionados de caída de árboles. También sabemos los que menos aguantan las condiciones urbanas, como las acacias, eucaliptos y cipreses”, indicó la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.

De hecho, hay que recordar que el pasado jueves en la carrera 7a con calle 90, en la localidad de Chapinero, un árbol cayó encima de una camioneta y la Secretaría de Movilidad informó que en el hecho resultaron cinco personas lesionadas.

Ante este aumento de reportes de árboles volcados y en riesgo, la Secretaría de Ambiente ha incrementado las revisiones y seguimiento de los individuos en diferentes sectores de la ciudad.

“Continuaremos haciendo evaluaciones y tratamiento preventivo de todo el arbolado de la ciudad. Siempre necesitamos la ayuda de la ciudadanía, que llamen al 123 cuando vean un árbol con un tronco afectado, que se le vean hongos o pudriciones, que tengan ramas en malas condiciones o encharcamientos en sus raíces”, agregó la secretaria de Ambiente.

De igual forma, indicó que las localidades con mayores incidentes por árboles son: Usaquén, Chapinero y Suba, mientras que las especies que más susceptibles de volcamientos son las acacias negras y japonesas, ciprés, saucos y eucaliptos, entre otros.

Por tal razón, la entidad enumeró las claves de cómo identificar un árbol en riesgo:

• Tiene encharcamientos permanentes en la base del árbol.
• Tiene ramas muertas.
• Presenta inclinación, tiene grietas o rajaduras en el tronco.
• Muestra cavidades, hongos o pudrición en el tronco o en las ramas.
• Presenta daños considerables por causa de un choque.
• Hay árboles caídos y/o muertos alrededor.
• Se observa presencia de roedores en la base del árbol.

Vale recordar que durante el 2021, tres localidades estuvieron entre los sectores en los que más árboles fueron sembrados en Bogotá: Ciudad Bolívar con 13.000 plantaciones, seguido de Suba con 10.056 y Fontibón con 3.328 árboles sembrados.

Adicional, la Secretaría señaló que Bogotá cuenta con 200.000 nuevos árboles plantados en diferentes ecosistemas estratégicos de la ciudad, lo que quiere decir que esta Administración ha plantado aproximadamente 250 árboles por día.

Los árboles plantados corresponden a especies nativas como aliso, arrayán, corono, cajeto, mano de oso, mortiño, tibar, chilco, hayuelo, ciro, tinto, tomatillo, lupino. Estos individuos vegetales fueron seleccionados de manera planificada y bajo criterios técnicos para que se puedan adaptar al suelo y prestar diferentes servicios ecosistémicos.

Por su parte, en cuanto a Colombia, el Ministerio de Ambiente, con apoyo de entidades del sector público y privado, del Ejército, gobernaciones, alcaldías y Corporaciones Autónomas Regionales, lideran la Gran Sembratón Nacional, un proyecto que busca llegar a los 180 millones de árboles sembrados en todo el territorio nacional para 2022. Hasta la fecha se han reportado más de 74 millones de árboles plantados.

Carlos Eduardo Correa, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, precisó hace un tiempo que “sembrar significa sembrar la vida para las futuras generaciones. Esta es una oportunidad para celebrar la diversidad colombiana. Vamos a decirle al mundo una vez más que Colombia es un actor principal en la lucha global contra el cambio climático”.

Las instituciones y personas que quieran sumarse a este propósito nacional deben escoger una planta nativa que tenga una altura superior a 50 centímetros y elegir un lugar adecuado para la siembra como cuencas, rondas hídricas, nacimientos de agua, zonas abastecedoras de acueductos, áreas protegidas y regionales, reservas forestales, áreas destinadas a la reconversión productiva, territorios colectivos o comunidades étnicas. Todas las siembras se deben registrar en el Contador de árboles del Ministerio de Ambiente.