El presidente del Senado, Roy Barreras, hizo parte del Encuentro Internacional sobre Conflicto y Crimen Organizado y allí aprovechó el escenario para referirse a la paz total que promueve el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
En dicho espacio, Barreras reiteró que respalda la buena intención del mandatario de los colombianos. Y así como aplaudió su propósito de alcanzar la paz, lanzó varias advertencias.
“La preocupación de muchos, a propósito de que la buena intención de establecer un cese al fuego multilateral, que incluya a todo tipo de organizaciones criminales, es que en la práctica, puede producirse, si no se está produciendo ya, solo un cese al fuego: el cese al fuego de las Fuerzas Militares y policiales”, dijo Barreras.
El presidente del Senado explicó que sobre el terreno, “resulta imposible para los agentes del Estado determinar en un patrullaje de unos señores ilegales con uniformes, fusiles y botas pantaneras, a qué organizaciones pertenecen”.
Y puso un ejemplo: “puedo imaginar a un capitán, a un mayor en Argelia, Cauca, o Policarpa, Nariño, preguntándoles ‘me permiten un carné señor, ustedes son marquetalios, mordiscos o son golfos, o elenos’. Como no pueden salir a identificar quiénes son los señores, les toca quedarse en el comando. Si disparan violan la orden del ejecutivo del cese al fuego y si salen sin disparar, les disparan a ellos. Eso se traduce en parálisis de las Fuerzas Militares”.
Barreras afirmó que solo un cese al fuego definido exclusivamente con las insurgencias (la guerrilla del ELN) permite que las Fuerzas Militares “actúen como es su deber, contra las organizaciones del narcotráfico”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/semana/CCMLN4EVLVGDPLLPBEF2UP22WI.jpeg)
En el encuentro, donde además asistió el excomisionado de paz, Sergio Jaramillo, y el exvicepresidente, Óscar Naranjo, Roy Barreras, explicó que hay dos tipos de organizaciones en el conflicto colombiano: las que tienen un origen político y que él llama insurgencias (ELN), y los grupos narcotraficantes. “Justicia transicional para las insurgencias; diálogos de paz con el ELN, todo nuestro apoyo”, anunció el presidente del Senado.
Sin embargo, con las organizaciones del narcotráfico, “lo único que puede avanzar, sin poner en duda la legitimidad del Estado de Derecho, es el sometimiento a la justicia penal ordinaria. No puede haber justicia transicional”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/semana/43U33VBHBFA5TESZMPCGTUKDCY.jpeg)
Agregó: “las conversaciones, algunas de ellas clandestinas, desautorizadas en las últimas horas de infinidad de intermediarios que pretenden negociar la ley con los narcotraficantes, las deslegitimamos. Las desautorizamos absolutamente. El Congreso no va a tramitar una ley que sea negociada con los narcotraficantes”, advirtió.
Sugirió que el Estado, en aras de la búsqueda de la paz total, “puede construir una ley desde la institucionalidad y decirles a las organizaciones criminales: ‘esto es lo que hay, una ley que puede contener beneficios, facilidades para el sometimiento, pero esto es lo que hay, se someten o los someto’. No se negocia la ley con los narcotraficantes”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/semana/4NZFMPB2XJBKJCZEWBIAKR5NTM.jpg)
Él, confesó que ve con preocupación que intermediarios, no autorizados, pretendan que se hagan diálogos de paz con organizaciones del narcotráfico. “No se puede porque no hay conflicto armado internos con ellos. A nosotros nos parece inadecuado, aunque sea de buena fe, plantear cese al fuego con organizaciones criminales del narcotráfico, cuyo origen ha sido el narcotráfico”, anunció.
Por último, el congresista opinó que el Gobierno del presidente Gustavo Petro “debería concentrarse exclusivamente en el diálogo de paz con las insurgencias y posibilitar los ceses al fuego con ellos. Y con los demás, la ley de sometimiento como posibilidad o la activa presencia y estrategia de seguridad nacional para garantizar que quienes no se sometan sean sometidos por la justicia”.