Bloqueos en vía Medellín–Eje Cafetero completan 24 horas: manifestantes piden presencia del Gobierno

Desde el 28 de agosto no se mueve un vehículo por la carretera que conduce del municipio de La Pintada hacia La Felisa, en el corredor que une al departamento de Antioquia con Caldas, por una manifestación ciudadana que se mantiene activa hasta este lunes, de acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Vías (Invías).

Los protagonistas de la protesta son los habitantes de La Pintada, que alegan que los proyectos de infraestructura los han aislado del mapa, pues los vehículos que llegan del Pacífico hacia la capital de Antioquia ya no se movilizan por los sectores del pueblo, sino por calles externas donde no se beneficia el comercio.

En imágenes registradas en las redes sociales se ve la dimensión del bloqueo: cientos de vehículos están represados en ambos lados del eje vial. Según la Asociación de Transportadores de Carga (ATC), las operaciones logísticas desde y hacia el suroccidente del país están paralizadas. Lo mismo con los viajeros que se movilizan para el Eje Cafetero.

Uno de los voceros del paro ciudadano, Juan Galeano Tapias, aseguró que el escenario que hoy están padeciendo se debe a la falta de escucha por parte de las entidades del Estado. En particular, acusó a las concesiones viales de la zona y a la Agencia Nacional de Infraestructura de taparse los oídos, presuntamente, ante sus peticiones.

“Estamos reclamando los derechos de los ciudadanos y de la soberanía antioqueña. Queremos decirles que es responsabilidad de la Agencia Nacional de Infraestructura, Pacífico Dos y Pacífico Tres esto que está sucediendo. Gracias a ustedes, que no tienen voluntad de diálogo, está sucediendo esto”, afirmó el vocero de los manifestantes.

Ellos fijaron como condicionamiento para darle apertura a la vía un diálogo directo con el Gobierno nacional, donde esperan resolver los problemas que hoy los tienen en la calle. Lo mismo solicitó la Asociación de Transportadores de Carga, a razón de que las pérdidas millonarias son prolongadas, donde también resulta afectado el transporte de pasajeros.

“Rota la cadena de logística, señores Gustavo Petro y Aníbal Gaviria, entre el suroccidente y norte del país. Esperamos que no se atente contra el transporte público. Urgente atender socialmente al suroeste antioqueño”, afirmó ATC a través de su cuenta de Twitter. Por otro lado, Invías refirió que no hay una carretera alterna para esquivar el estallido social.

Otras quejas

La Asociación de Transportadores de Carga también proyecta pérdidas billonarias por la temporada de lluvias en Antioquia: el cierre de las vías por los deslizamientos de tierra ha frenado la operación hacia varias regiones del país. Diariamente, al menos un eje vial del departamento tiene bloqueos parciales causados por las fuertes precipitaciones. Ese escenario se traduce en retrasos y mil millones de pesos menos de ganancias.

La situación más crítica se vive en las carreteras del suroeste de Antioquia que conectan a la región con el Eje Cafetero. Hace más de un mes el principal corredor está clausurado por una falla geológica que está desprendiendo la vía en la jurisdicción de Santa Bárbara.

Como alternativa para movilizar a los pasajeros y fletes hacia las ciudades del sur del país, las autoridades recomiendan transitar por los municipios de Amagá y Santa Fe de Antioquia. Sin embargo, esas zonas están gravemente impactadas por los movimientos en masa.

Ánderson Quiceno, director ejecutivo de la Asociación de Transportadores, alertó que “las afectaciones que se vienen viviendo en las vías del suroeste son bastante complejas. Situaciones que nos dejan en el día de hoy con todos los corredores viales cerrados”.

A su juicio, las emergencias que se están presentando sobre las carreteras de esa subregión de Antioquia no responden a la coyuntura por la temporada de lluvias, dado que desde hace tres años están denunciando el mal estado. Solo por los incidentes que hay en el suroeste, los conductores ya han cuantificado saldos negativos superiores a los 2,2 billones de pesos justificados en los gastos que generan los largos trayectos en los últimos cuatro meses.