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Foto borrosa de un militar caucásico experimentado vestido con uniforme negro sosteniendo la pistola con una mano robo | Foto: Getty Images/iStockphoto

Antioquia

Violencia en el sur de Antioquia: dos hermanos y una mujer fueron asesinados

Cuatro homicidios se cometieron este martes en el departamento, otra persona quedó lesionada en medio de un ataque armado.

10 de agosto de 2022

El comandante de la Policía de Antioquia, coronel Daniel Mazo Cardona, dio cuenta de dos ataques sicariales que ocurrieron en las últimas horas en los municipios de Sonsón y Argelia, ubicados en el suroriente del departamento. Las autoridades tratan de identificar a los responsables que huyeron cuando accionaron las armas de fuego.

El primer hecho se registró en la zona urbana de Sonsón cuando una pareja fue sorprendida por un grupo de delincuentes que disparó en repetidas oportunidades. Al parecer, los hombres armados cruzaron la puerta donde residían las víctimas en el barrio Colombia de esta población, amenazada por las organizaciones locales que trafican estupefacientes.

Una vez dejaron a la pareja tendida sobre el suelo, los sicarios huyeron de la zona en una motocicleta. Cuando llegaron los organismos de socorro y las unidades de la Policía Nacional, hallaron sin vida a una mujer de 22 años y a su novio, que tiene 33 años, gravemente lesionado por los impactos de bala.

“Se adelantan las investigaciones pertinentes para esclarecer los hechos. Diligencias dejadas a disposición de la Fiscalía”, advirtió el comandante de esta institución en Antioquia, quien ha tenido que lidiar con la crisis de seguridad que hay en el departamento por cuenta de las acciones delincuenciales de los criminales.

Cinco horas después, en el vecino municipio de Argelia, murieron violentamente dos hermanos en hechos similares: hombres encapuchados invadieron la vivienda de las víctimas y, una vez los identificaron, alzaron las pistolas, les apuntaron y vaciaron las balas que tenían contra los parientes, de acuerdo con el informe de las autoridades.

El doble homicidio ocurrió en el barrio El Tanque, donde residía la familia Valencia. Ante la mirada de los suyos, perdieron la vida Santiago Durán Valencia, de 21 años, y su hermano Yidar Alexander Agudelo Valencia, quien le llevaba diez años de ventaja al menor. De igual manera, no hay hipótesis sobre este crimen.

En lo que va corrido de este año, Sonsón y Argelia suman 20 homicidios, el promedio lo concentra la primera localidad con 17 casos. El mayor número de asesinatos se han cometido con arma de fuego, las víctimas son los hombres y las zonas más comunes son las urbanas, tal como marca el índice del resto de los pueblos que integran el oriente de Antioquia.

Con base en el observatorio de derechos humanos del Instituto Popular de Capacitación, en esta zona del departamento hay una alteración sostenida del orden público a razón de las economías ilegales, como la producción y comercialización de estupefacientes. La ubicación estratégica que tienen sobre el mapa los hace atractivos para los delincuentes.

Tanto en Sonsón como en Argelia operan dos organizaciones criminales: El Mesa y El Clan del Oriente, que tienen brazos distribuidos en buena parte de la subregión; mientras que el primero tiene su origen en las calles del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, en el municipio de Bello.

Además de estos hechos, otro homicidio afectó la tranquilidad del suroeste. Los gremios de transporte público de Antioquia denunciaron el asesinato de Hober de Jesús Calle, un conductor de 55 años que movilizaba a pasajeros entre los municipios de Santa Bárbara y Fredonia, poblaciones del suroeste del departamento.

El crimen ocurrió en la mañana de este martes, cuando la víctima cumplía con la última ruta veredal entre los dos pueblos, como lo hizo diariamente en los últimos años sin tener problemas con nadie. Sin embargo, encontró la muerte en medio de las montañas de esta subregión, donde operan los grupos delincuenciales comunes organizados.

Mientras cruzaba por la vereda El Guayabo, un hombre que estaba al borde de la carretera estiró la mano para que frenara el trayecto. El conductor interpretó que el sujeto tomaría el servicio, por lo que accedió a su petición. Una vez ascendió al bus, se ubicó en uno de los asientos y, sorpresivamente, se levantó segundos después con un arma de fuego que accionó contra el hombre.