Falsos enfermeros engañaron a adulto mayor y le robaron millonaria suma

Delincuentes se están disfrazando de enfermeros de EPS o vacunadores para ingresar a las viviendas y engañar a adultos mayores con el propósito de hurtar sus pertenencias. Las denuncias sobre este tipo de casos se han registrado en varios sectores de la ciudad de Bogotá y apuntarían a la misma banda criminal.

Según Noticias Caracol, en un reciente asalto realizado bajo esta modalidad, delincuentes disfrazados con prendas de personal de salud ingresaron a una vivienda en el barrio El Campín, localidad de Teusaquillo. Posteriormente, engañaron a una pareja de adultos mayores diciendo que se trataba de “una visita de la EPS”. Sin embargo, en realidad era una coartada para efectuar el hurto.

Según reseñó el medio, los delincuentes se habrían llevado objetos y dinero en efectivo. El valor hurtado ascendería a 100 millones de pesos. Una habitante del barrio en mención indicó que los estafadores se aprovecharon de la inocencia del propietario de la casa, quien les permitió ingresar sin mayor problema.

“El señor no cayó en cuenta que no lo habían llamado de la EPS”, le dijo a Noticias Caracol. En esa línea, anotó que el hombre decidió abrir las puertas de su hogar y permitió la entrada de los asaltantes.

De acuerdo con el relato de otra mujer, los falsos enfermeros indicaron al hombre que debía ir al baño y desvestirse. Fue en ese momento en que habrían aprovechado para inspeccionar las habitaciones, tomar los objetos, el dinero y escapar del lugar.

“Lo hicieron entrar al baño para que se desvistiera. Entró al baño y, mientras se desvestía, lo robaron”, le manifestó la mujer a Noticias Caracol.

Este no sería el único caso de hurto bajo la modalidad de engaño. En El Tejar, localidad de Puente Aranda, falsos enfermeros habrían ingresado a otra vivienda para llevarse los objetos de valor. En dicho caso, mientras una de las supuestas funcionarias distraía a la víctima, los demás sujetos inspeccionaban la casa.

Delincuentes atracaron un gastrobar en Teusaquillo

En la localidad Teusaquillo continúan los hechos de inseguridad, según denunciaron los habitantes de esta zona de la ciudad. Los establecimientos comerciales nocturnos están azotados por delincuentes.

El atraco más reciente ocurrió a las 10:45 p. m. del martes 8 de marzo en un gastrobar ubicado en el barrio La Soledad, de esta localidad. Según testimonios recogidos por un reportero del programa Arriba Bogotá, del canal Citytv, tres delincuentes llegaron en un vehículo blanco y sometieron a seis ciudadanos, entre clientes y trabajadores, que se encontraban en el establecimiento comercial.

Los amenazaron y encañonaron con sus armas de fuego, logrando robarles sus pertenencias y dinero en efectivo.

Una trabajadora del local le relató al medio que ya estaban a punto de cerrar el local y se encontraban con la reja cerrada; solo tenían una puerta entreabierta porque estaban esperando a que salieran los últimos clientes, cuando llegaron los tres hombres armados a cometer el atraco. Precisó que les robaron los teléfonos celulares, maletas y un computador.

El dueño del gastrobar, que prefirió no identificarse, alertó que la situación de inseguridad es muy grave en Teusaquillo. “Llevamos apenas cinco meses con el local, así uno no puede salir adelante con este tipo de situaciones de inseguridad”, lamentó.

Ante la magnitud del atraco, una unidad del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), de la Fiscalía, se acercó hasta el lugar: calle 45 con carrera 27A, de Teusaquillo.

Por su parte, el coronel Edwin Hernando Castiblanco, oficial de inspección de la Policía de Bogotá, informó que con la verificación de cámaras y video, y la información que suministraron los afectados, se está investigando para dar con el paradero de los tres delincuentes.

El vocero policial agregó que se tienen identificadas las placas del vehículo en el que se dieron a la fuga los ladrones, por lo que se espera su pronta captura.

Los vecinos de los barrios aledaños, como Palermo, Galerías, Belalcázar y San Luis aseguran estar cansados de los constantes robos a viviendas y establecimientos comerciales, especialmente en horas de la noche, por lo que exigieron mayor presencia de uniformados de la Policía.