Toman medidas: nuevos relevos de altos mandos militares en Cúcuta donde se presentó atentado con camioneta bomba

Fuentes militares confirmaron los nuevos relevos de altos cargos que se darían en el cantón militar de Cúcuta, en Norte de Santander, donde explotó un carro bomba dejando más de 30 heridos. Se trataría del coronel Ilver Orlando González, comandante de la Brigada 30 y del coronel Pedro María Vega, jefe del Estado Mayor.

SEMANA conoció que mañana viernes se llevará a cabo una junta asesora de generales, en donde se oficiaría el relevó los coroneles, que posteriormente serían llamados a calificar servicios por las fallas de seguridad que se dieron en el Cantón Militar.

A las nueve de la mañana se reunirán los altos mandos del Ejército para analizar los cambios y postular los nombres de los oficiales que reemplazarían a los coroneles.

Sin embargo, la fuente militar no descartó que en medio de la reunión se postulen nuevos nombres, para ser relevados debido a la grave situación que se presentó en la unidad, en donde había mínima seguridad para el ingreso de los vehículos como quedó en evidencia a través de cámaras de seguridad.

Desde el momento del atentado, las acciones violentas fueron rechazadas por el gobierno. El ministro de Defensa, Diego Molano, dijo “a la fuerza pública se le respeta, canallas que intentan afectar a nuestros soldados pagarán, con contundencia, hasta encontrar a todos los culpables”.

Según las hipótesis una camioneta blanca ingresó a las instalaciones militares con sujetos que se habrían hecho pasar por funcionarios públicos. A las 3:10 de la tarde se registró una primera explosión y dos minutos después se presenta una segunda explosión afectando de manera grave instalaciones. 36 personas resultaron heridas; 2 son civiles que están fuera de peligro; 29 uniformados y 3 tienen un cuadro clínico reservado.

“Estoy con ellos, estamos firmes, nada ni nadie atemoriza a la fuerza pública colombiana. Seguiremos velando por la defensa y seguridad de los colombianos”, enfatizó Molano.

La Fiscalía se encuentra en el lugar de los hechos realizando las investigaciones que conduzcan a establecer los responsables de este atentado.

Por este caso las autoridades conformaron un equipo especial de investigadores entre policía, fiscalía y ejército, además de investigadores del FBI que llegaron para unirse a las pesquisas.

En un primer lugar, el gobierno responsabilizó a la guerrilla del ELN de la acción terrorista, sin embargo, no dejó por fuera a otras estructuras ilegales como las disidencias de las Farc bajo el mando de Iván Márquez.

Una de las escenas que llamó la atención y ha generado reproche fuerte dentro del gobierno al Ejército, es la precaria seguridad que había cuando ingresó la camioneta cargada con explosivos al cantón militar.

En un video se puede ver cómo un soldado hace una escueta inspección al vehículo que no duró más de diez segundos y luego le dio vía libre para que ingresara.

Los reproches al Ejército han estado dirigidos a por qué no había perros antiexplosivos y antinarcóticos como ocurre en todas las unidades militares del país. También por qué solamente había un soldado haciendo la inspección cuando en el componente debe haber al menos cuatro o cinco militares.

A pocas horas de haberse presentado el atentado, el comandante de las Fuerzas Militares, el general Luis Fernando Navarro, había anunciado el relevo de tres oficiales, un teniente coronel comandante del batallón de apoyo y servicio para el combate No. 30, segundo comandante y oficial de operaciones. Cuatro suboficiales: el comandante de guardia, suboficial de administración, cabo de guardia y cabo relevante.

Frente al explosivo utilizado, se determinó que eran 30 kilos de pentrita el que fue camuflado dentro de la camioneta de alta gama.