Se calienta la batalla electoral por Antioquia, la conquista más difícil para Petro

Medellín, capital de Antioquia, es un campo de batalla electoral y político después de la suspensión del alcalde Daniel Quintero. A 16 días de la primera vuelta presidencial, la segunda ciudad más importante del país enfrenta manifestaciones de apoyo al mandatario que presuntamente participó en política a favor de Gustavo Petro.

Antes de este episodio, la región no parecía ser una preocupación para Federico Gutiérrez, exalcalde de Medellín, y quien tiene el apoyo del expresidente Álvaro Uribe Vélez. El candidato lidera todas las encuestas de cara a la primera vuelta presidencial en Antioquia y el Eje Cafetero. La última, hecha por YanHaas para Noticias RCN, evidencia una intención de voto del 38 % a su favor contra un 23 % de Petro.

Sin embargo, el episodio del alcalde, considerado el muro de contención del uribismo, cambia el panorama y podría propiciar terreno para que el líder del Pacto Histórico conquiste el departamento que desde siempre le dio la espalda a su propuesta política.

En la elección de 2018, Petro fue derrotado de forma contundente en Antioquia. En primera vuelta fue superado por Iván Duque, quien sacó más del 50 % de votos, y Sergio Fajardo, que registró un contundente 28,46 %. Petro obtuvo solo un poco más del 9 % de los sufragios en un departamento clave para lograr una victoria definitiva.

En segunda vuelta, Duque le sacó aún más diferencia obteniendo el 72,6 % de votos del departamento. Petro mejoró su marca inicial, pero únicamente logró un poco más de 550.000 votos.

Quintero ganó en la capital del departamento que depositó 1′850.996 de votos por el presidente Duque. Por la temprana desfavorabilidad del Gobierno, el exviceministro TIC logró vencer al candidato del uribismo y al que representaba el continuismo tras la administración de Federico Gutiérrez.

La victoria de Quintero fue estrecha y, desde el principio, se evidenció una división en la ciudad. La inconformidad de un sector de la sociedad hizo que se adelantara un proceso de revocatoria que al final fue detenido por irregularidades en la certificación de cuentas.

A pesar de esto, el alcalde, que apoya a Gustavo Petro desde sus inicios en el activismo en 2014, ganó terreno importante para los alternativos en la región.

Por eso, conociendo tanto las dificultades como las oportunidades que tenía en Antioquia, Petro dio por iniciada su campaña presidencial con una manifestación de más de 5.000 personas en el municipio de Bello.

“Hemos escogido Bello por muchas razones para iniciar la campaña del Pacto Histórico. Una de ellas, quizás no la principal, es demostrar que Antioquia cambia. Es demostrar que Antioquia, como lo hizo Rafael Uribe Uribe, nacido en el sur del departamento, puede generar los movimientos de la transformación de Colombia puede generar las fuerzas que hagan cambiar a Colombia. Si Antioquia cambia, cambia Colombia”, dijo Petro en febrero de este año.

Sin embargo, con la consulta interpartidista se reafirmó el liderato de Gutiérrez y la desventaja de Petro. El candidato del Equipo por Colombia obtuvo 864.599 votos en Antioquia y Petro tan solo 271.761. Fico lo triplicó, pero el líder del Pacto Histórico logró ser el alternativo más votado, por encima de Sergio Fajardo.

Lo cierto es que, mientras Petro sigue estando debajo de Gutiérrez en la región, ha ganado terreno importante en los últimos meses. Pasó de representar un 9 % en primera vuelta de 2018 a significar un posible 23 % después de las consultas, recortando la diferencia con el candidato de la clase política tradicional.

En diciembre de 2021, según YanHaas, Petro contaba con una intención de voto del 14 % entre la población paisa. En cinco meses, el crecimiento ha sido de casi 10 puntos porcentuales.

Petro se metió en la pelea a favor de Quintero

Frente a la desventaja clara que tiene en el territorio, tras la suspensión de Daniel Quintero, Petro se metió en la protesta mediática viendo una clara oportunidad de presentar como víctimas a aquellos que lo apoyan.

Desde el principio y por la experiencia personal, Petro pidió intervención de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por la inhabilidad que tendría la Procuraduría para suspender a un funcionario en cargo de elección popular. Sus alfiles lo siguieron, haciendo ruido a favor de quien presuntamente habría infringido la ley participando en política a favor del candidato progresista.

“De pronto nos hace ganar”, fue una de las reacciones de Petro frente a la sanción de Quintero, que el alcalde recibió sonriente en la plazoleta de la Alpujarra junto a congresistas electos del Pacto Histórico y un estratega de izquierda.

Por esta oportunidad, Petro está tan metido en la situación de Quintero que le asignó un abogado.

“Le he dado el poder, tengo que decir además que ha sido el abogado que en solidaridad Gustavo Petro me ha puesto”, dijo Quintero en rueda de prensa, durante las manifestaciones frente a la Procuraduría en Bogotá.

En Antioquia, a 16 días de la primera vuelta, la estrategia de la izquierda cambió, con toda la atención puesta frente a la suspensión de Quintero y la indignación que esta causó en una buena parte de la población medellinense.