Ola invernal en Norte de Santander deja 10 personas muertas y miles de damnificados

El departamento de Norte de Santander se sigue viendo afectado por la temporada de la ola invernal que comenzó desde hace más de tres meses. Las fuertes lluvias han afectado a miles de pobladores de diferentes municipios de la región.

Así las cosas, uno de los principales territorios afectados es el municipio de Toledo, donde el deterioro de la malla vial esta en riesgo de dejar incomunicada a esta comunidad con los sector aledaños como lo es la zona de Chinácota.

Los organismos de socorro han advertido a la entidad correspondiente que si las lluvias continúan posiblemente haya una perdida de banca en la vía y esto imposibilitaría el libre tránsito vehicular con el interior del departamento.

Por tal motivo, el director de la Unidad de Gestión de Riesgo y Desastres del municipio en mención, Fernando Jurado, fue enfático al señalar que la emergencia se origina en el sector de San José de Pedregal a inmediaciones de una mina llamada Altamira.

“Debido al fuerte aguacero tuvimos un deslizamiento en este sector el cual está afectando en la movilidad, ya el municipio ha generado el banco de maquinaria para hacer una ampliación de la vía, en estos momentos está una máquina pajarita y una volqueta haciendo los trabajos, y esperemos que en agosto se agudizan más las lluvias por lo que tendremos constante movimiento de tierra”, señaló el funcionario

Cabe mencionar que desde la Gobernación de Norte de Santander, a través de la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, adelantan visitas técnicas de inspección, acompañamiento y labores de mitigación en los municipios afectados por las lluvias.

“Esta es la vía departamental que comunica a Toledo con el municipio de Chinácota y en estos momentos este territorio tiene un plan de acción para hacer los arreglos en las vías pero solo en mejoramiento de pasos”, argumentó Fernando Jurado.

Las fuertes lluvias que se registran en este departamento han dejado deslizamientos de tierra, inundaciones y ha cobrado la vida de diez personas, entre ellas tres niños de una misma familia.

Actualmente, los 40 municipios que comprende este departamento presentan afectaciones en múltiples índoles, como lo es deslizamientos de tierra, deterioro en la malla vial, viviendas colapsadas, inundaciones, pérdidas humanas, de enseres y animales, entre otras problemáticas.

Además, esta ola invernal ha provocado que más de 50 familias hayan tenido que evacuar de sus viviendas debido al riesgo de presentarse una remoción en masa o crecientes súbitas de los ríos.

Por su parte, la consejera departamental de Gestión de Riesgos y Desastres, Adriana Milena Arias, dio a conocer en las últimas horas que estas muertes que ha dejado la ola invernal corresponden a una mujer en el municipio de Ábrego, dos más en el municipio de Tibú y tres en zona rural del municipio de Sardinata, todos pertenecientes a la zona del Catatumbo.

Debido a estas emergencias, la funcionaria indicó que Norte de Santander se ubica entre los cuatro departamentos más afectados por las condiciones climáticas. Por tal motivo, manifestó que se vienen realizando trabajos en articulación con la Cruz Roja, Defensa Civil, Bomberos, Corponor y el Instituto de Vías (Invías), con el fin de atender estas situaciones.